Una de las enfermedades más comunes en los cultivos españoles es la Roya Amarilla. Aunque también puede afectar a la cebada, triticale y otras gramíneas, los ataques más significativos se producen en el cultivo de trigo.
El agente causante de este tipo de roya es el hongo Puccinia striiformis. Pese a que esta enfermedad está presente desde hace muchísimo tiempo, en los últimos años se ha observado la introducción de una nueva raza de Roya Amarilla en nuestro país denominada “Raza Warrior”, una variante muy agresiva y fácil de propagarse en condiciones frescas y húmedas.
A través de los apuntes técnicos de LG Seeds, podemos conocer todas las características de esta enfermedad, así como las formas de reconocerla o controlarla.
Origen
Enfermedad asociada a temperaturas frescas (entre 10 y 15ºC): para poder desarrollarse, el hongo causante de esta enfermedad necesita una humedad relativamente alta y temperaturas por encima de los 2ºC. Cuando la temperatura baja de los 2ºC o supera los 22ºC, el hongo paraliza su desarrollo.
Debido al factor limitante que supone la temperatura, las primeras infecciones suelen producirse a la salida del invierno o durante la primavera. Aun así, los trigos son sensibles a este patógeno durante cualquier fase de su ciclo. El riesgo de ataque de Roya Amarilla aumenta cuando, durante la campaña, a un invierno suave le acompaña una primavera fresca y lluviosa.
Detección
Fácil de identificar en los estados iniciales: forma de rodales. De lejos, aspecto amarillento y algo deprimido. Más de cerca, lesiones amarillentas de forma alargada en las hojas, que se alinean longitudinalmente en la dirección de la nervadura de la hoja, en un principio estrechas y no presentan más que una decoloración por pérdida de clorofila.
Cuando va avanzando la enfermedad se desarrollan pústulas estrechas, alargadas y alineadas en hileras. Estos cuerpos fructíferos producen las esporas que reinfectarán nuevas hojas una vez liberadas. Cuando este cuerpo fructífero madura, se rompe la epidermis foliar que lo recubre y libera gran cantidad de esporas. Fáciles de observar, ya que pasando la yema del dedo por encima de ellas deja una mancha como de polvo de talco amarillo.
Si las condiciones ambientales óptimas para el desarrollo de la enfermedad persisten, llegará a afectar a la espiga y podrán apreciarse pústulas en las glumas.
Ciclo de la enfermedad
El inóculo de la Roya Amarilla es transportado por la acción del viento hasta las hojas de la planta sana . Se produce entonces la Infección del cultivo.
La enfermedad se va desarrollando a lo largo de los nervios de la hoja, produciendo los cuerpos fructíferos que liberarán las esporas que reinfectarán a la misma planta y también se dispersarán infectando a otras plantas.
Es una enfermedad muy agresiva: en condiciones óptimas, una espora de Roya Amarilla germina y produce la infección en un periodo de 1-3 horas, pudiéndose completar el ciclo de la enfermedad en 7 días produciendo un crecimiento “explosivo” de la enfermedad.
Medidas de control
- Selección de variedades tolerantes.
- Evitar una alta densidad de siembra.
- Eliminar rebrotes.
- Rotación de cultivos.
- No fertilizar con exceso de nitrógeno.
- Gestionar de manera correcta los residuos y la paja de cultivos anteriores.
- Realizar tratamientos fungicidas.
Recomendaciones
Vigilar y tratar en el inicio de los síntomas, con las primeras pústulas de la enfermedad:
Infección temprana: tratar esos rodales; con ello se conseguiría retrasar la explosión de la enfermedad, y por tanto el tratamiento generalizado.
Ataque más general: con rodales más afectados y hojas con pústulas emitiendo esporas por toda la parcela. Se deberá aplicar un tratamiento general.
Tratamientos
Persistencia de 2 a 3 semanas: con condiciones climáticas adecuadas podría ser necesario un segundo tratamiento, el cual se llevaría a cabo con el trigo espigado y en periodo de llenado del grano, si, durante ese tiempo la Roya progresa y comienza a infectar a la hoja bandera, la anterior e incluso a la espiga.
Variedad de tratamientos: Existen numerosos productos comerciales en el mercado. Según la experiencia de LG Seeds, los que tienen como materia activa triazol & estrobilurina, aunque algo más caros, son más efectivos y tienen una mayor persistencia, lo que normalmente permitirá acabar el ciclo con un solo tratamiento.
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